A la hora de elegir el tipo de pasta, aparte de que unas y otras sean adecuadas para depende qué receta, lo cierto es que siento predilección por los espaguetis y similares. Sin duda alguna es porque las salsas les van genial, se impregnan perfectamente y cada bocado es una explosión de sabor.
INGREDIENTES:
- 500 gr de espaguetis.
- 100 gr de panceta.
- 3 huevos.
- 70 gr de queso parmesano, pecorino o grana padano.
- 200 ml de nata para cocinar.
- 1 cebolla mediana.
- Aceite, sal y pimienta negra recién molida.
- PREPARACIÓN
- Empieza cociendo los espaguetis: pon agua a cocer en una olla, suficiente para que cubra la pasta de sobra, y una cucharadita de postre de sal.
- Cuando hierva, añade los espaguetis y, cuando vuelva a hervir, cuenta los minutos que muestre el paquete (en este caso son 9 minutos). Cuando esté lista, escúrrela.
- Mientras, elaboramos el resto de la receta. Pela la cebolla y córtala muy picadita. En un cazo o sartén pequeña, pon un poco de aceite y sal, y a fuego medio-lento, pocha la cebolla, cuidando que no se dore demasiado, dándole vueltas de vez en cuando, durante unos 10 minutos, hasta que esté ligeramente transparente.
- Corta la panceta en tiritas finas y, en una sartén antiadherente en la que después te quepa toda la pasta, saltéala a fuego medio, que se dore ligeramente. Reserva.
- En un bol, bate los huevos, ralla el queso y añádelo. Remueve bien e incorpora un poco de pimienta negra molida. Mezcla bien para que se fusione todo.
- Echa la nata en el cazo con la cebolla, además de pimienta negra molida, remueve bien y baja el fuego al mínimo. Deja que se caliente todo junto durante un par de minutos.
- Ahora es cuando debes aplicar el verdadero truco para elaborar la perfecta carbonara: cuando los espaguetis estén listos, y aprovechando que siguen bien calientes tras su cocción, échalos a la sartén con la panceta, remueve bien durante un minuto, y a continuación añade la mezcla de huevos y queso, removiendo suavemente para que la pasta quede impregnada con la mezcla. De esta forma, el propio calor de los espaguetis hará que el huevo se cuaje ligeramente y el resultado quede cremoso pero no crudo. También el queso quedará derretido y mezclado por completo en el plato.
- Cuando el huevo ya no esté líquido, es el momento de incorporar la mezcla de nata y cebolla y revolver bien, para que los espaguetis se impregnen por completo con la salsa y queden cremosos.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar